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Revisión de vista para niños: ¡Vuelta al cole!

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revisión de vista para niños

¡La vuelta al cole ya es una realidad! Millones de niños han regresado a las aulas tras un verano caluroso en el que seguro que han disfrutado a tope. Pero es el momento de retomar los estudios. También es momento para una revisión de vista para niños. Solo así, estaremos seguros de que pueden aprender de la forma más sencilla y natural.

Cada año, son más y más los pequeños que tienen problemas escolares por culpa de una mala vista. ¿Nunca has escuchado a un niño quejarse de que no ve la pizarra? La causa es clara. Por desgracia, las quejas siempre llegan cuando son demasiado tarde. Estar atentos las distintas señales y ponerse en manos de profesionales son las herramientas que tenemos para anticiparnos a este problema.

Es posible, además, que en los últimos años se haya descuidado un poco este hábito. Al igual que nos estamos encontrado casos de dificultad en el habla en niños tras la pandemia, también se dan casos de pequeños con más problemas en la vista de lo que nos gustaría. El abuso de la televisión, la tablet o el móvil puede ser una de las causas, pero no la única.

¡Una revisión de vista para niños al volver al cole es una gran idea!

Entre las principales razones para acudir a una revisión oftalmológica, nos encontramos con que es la fórmula que tenemos para prevenir posibles afecciones oftalmológicas. Entre los 4 y los 10 años, se produce en el ojo de los niños los cambios más importantes durante toda su vida. Por eso, esta fase es tan delicada y en la que debemos tener la máxima precaución y cuidado.

La revisión de vista para niños tiene una importancia extrema. Como podres, debemos ponernos en manos de un oftalmólogo pediátrico especializado. Solo así será posible detectar la mínima alteración en la vista y poder actuar contra ella.

Además, otro motivo para ponernos en manos de un experto después del verano es comprobar que ningún factor externo ha afectado a sus ojos o a su vista. Hablamos de, por ejemplo, el sol, la arena, el cloro de la piscina o, incluso, el aire acondicionado. Además, si tu hijo se ha quejado de picor de ojos o de irritación durante el verano, tendremos que someternos a una revisión completa para asegurar que todo está correcto. Nadie querría arriesgarse a que se agrave un problema por faltar a una cita como esta.

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