Con la vuelta al cole nos ocupamos de que todo esté listo: libros, uniformes, cuadernos… Pero hay otro aspecto muy importante que es la salud visual, estrechamente relacionada con el rendimiento escolar.
Como ya sabes, en Por Tu Salud contamos con un equipo oftalmológico que se ocupa de que tus ojos estén siempre sanos, además de ser expertos en blefaroplastia en Avilés. Somos, sin duda, la clínica adecuada para garantizar tu salud y la de los tuyos.
Como septiembre es el mes perfecto para retomar o iniciar los buenos hábitos, en el artículo de hoy nos ocuparemos de las revisiones con el oftalmólogo.
La salud visual en la infancia
Los controles visuales suelen realizarse ya desde el nacimiento, en la consulta pediátrica. No obstante, es recomendable que entre los 3 y los 4 años, los niños y niñas acudan a una revisión especializada con el oftalmólogo/a antes de comenzar su vida escolar.
En etapas tempranas, muchos problemas de visión pasan desapercibidos porque los niños que no conocen la visión correcta, no notan que algo va mal y no pueden expresarlo.
En una primera consulta podemos comprobar si todo marcha correctamente, y pautar revisiones cada uno o dos años. Si detectamos algún problema, haremos un seguimiento más frecuente.
Problemas visuales más comunes en la infancia
A medida que crecemos, los trastornos de la visión pueden aparecer o acentuarse. Las condiciones más comunes en edades tempranas son:
- Hipermetropía: es la dificultad para enfocar objetos cercanos. Esta condición es normal en niños pequeños, pero si es excesiva debe tratarse, pues puede afectar al aprendizaje.
- Astigmatismo: es la distorsión de la visión, tanto de lejos como de cerca. Se produce por una curvatura irregular de la córnea.
- Miopía: es la dificultad para ver objetos lejanos. Es un problema muy frecuente, y cada vez más, por el uso excesivo de pantallas y la falta de actividad al aire libre.
- Estrabismo: es la desalineación de los ojos que afecta a la visión binocular y que puede provocar ambliopía si no se corrige.
- Ambliopía: es lo que conocemos comúnmente como “ojo vago”. Uno de los ojos no desarrolla bien la visión, perdiendo agudeza visual si no se trata a tiempo.
¿Cómo afecta la salud visual al rendimiento escolar?
Lo más habitual es que los niños pierdan el ritmo de las clases porque no ven correctamente la pizarra, no pueden tomar notas o seguir las explicaciones del profesorado. En asignaturas que requieren atención constante, como lengua y matemáticas, pueden quedarse rezagados.
La fatiga visual es otro de los problemas de salud que experimentan los más pequeños, especialmente aquellos con hipermetropía o astigmatismo. La lectura y la escritura son actividades que requieren mucha concentración, y los niños con fatiga visual experimentan dificultad para mantener la atención.
Al sentirse frustrados, estos niños/as suelen manifestar falta de interés, irritabilidad e incluso presentar un comportamiento disruptivo. Es habitual que padres y profesores confundan esto con falta de motivación o trastornos de la atención, cuando la realidad es que se trata de un problema puramente visual.
Este bajo rendimiento general, provocado por una mala salud visual, tiene solución. La revisión oftalmológica puede marcar la diferencia, además de aumentar el bienestar general del niño/a. Pide cita con nosotros y no dejes que los problemas de visión sean un obstáculo para su desarrollo.
